Las paredes son de Peron

Lo organización JP La Campora en Almirante Brown, manifestó su fuerte apoyo a la gestión de la presidenta y su repudio a la reciente imputación impulsada por el fiscal Gerardo Pollicita.

La noche del viernes 13 de febrero fue sorprendida por la irrupción de la militancia del campo popular, que salió a manifestar su irrenunciable apoyo a la presidenta, grabando las paredes de diferentes localidades de Almirante Brown con la frase “Ningun Braden mas, Cristina es Patria”.

En este caso vale destacar,  que mientras  algunos sectores solo se disponen a hacer pintadas o pegatinas a la hora promover candidatos, en este caso se salió a defender un proyecto de país, y la pintada llevo un solo nombre, casualmente el de la única persona del país que no puede presentarse para disputar el cargo de presidente de la nación.

Lealtad es la palabra que se usa en la jerga peronista, no hablar de candidaturas, si no militar con el objeto de sostener un proyecto determinado de país, que en este caso  los militantes sostienen a pura convicción y compromiso, en la calle, movilizando y militando en los barrios.

Juan Fabiani,  referente de la organización en el distrito, se expreso al respecto “el apoyo  incondicional de la militancia hacia la presidenta no me sorprende, es lógico, porque ella materializa la resultante de este proyecto de país, del proyecto que nos cambio la vida a los argentinos, todos los militantes nos debemos a Cristina y la lealtad hacia ella es nuestro espacio natural”.

La reacción de la los militantes de la JP La Campora, de dio tras la aparición del fiscal Gerardo Pollicita, que fue dirigente de Boca en tiempos en que Mauricio Macri era presidente de dicha institución, continuando la causa que dejo pendiente la muerte del fiscal Nisman, sobre una insustancial denuncia a la presidenta. Como primer medida, Pollicita decidió ir sobre su imputación.

Es absolutamente necesario destacar que este fiscal fue uno de los que adhirieron a la marcha opositora del 18 F, junto con otros fiscales enfrentados con el gobierno, como por ejemplo, Raúl Pleé y Carlos Stornelli.

Esto se vuelve desopilante, al recordar que Gerardo Pollicita fue secretario de Pleé: quien fuera irónicamente acusado por el propio Nisman, por el CELS y Memoria Activa, por "cajonear" la citación de los imputados en el juicio por encubrimiento por el atentado a la AMIA.